lunes, 28 de octubre de 2013

CARTAGENA, CIUDAD ACOGEDORA

Desde siempre me llamó mucho la atención este eslogan que, hasta hace unos pocos años, podía ser visto por todo aquel que llegaba por carretera a nuestra ciudad. El motivo de escogerlo como título de la historia de hoy está plenamente justificado pues en la ocasión que narro, al igual que otras muchas, Cartagena hizo gala de su carácter hospitalario. A finales del mes de Abril de 1927, y definido como todo un acontecimiento cultural, doscientos niños de las Escuelas Salesianas de Alicante visitaron nuestra ciudad en “viaje de instrucción y propaganda”. Previamente por parte de la Corporación Municipal se organizaron diferentes Comisiones encargadas de coordinar la estancia de los pequeños y los diferentes actos culturales, musicales y religiosos. De todas ellas la más importante fue la que se responsabilizó de buscar alojamiento para los niños y estuvo formada por los señores Dorda Mesa, Letang y la Tropa de Exploradores. Para facilitar la labor de dicha Comisión el alcalde Alfonso Torres, en una nota oficiosa, rogó a sus paisanos que cooperaran con la misma. Toda aquella persona interesada en acoger a niños en su casa debía comunicarlo en la Secretaría particular de la Alcaldía antes del día 26 de Abril. La respuesta no se hizo esperar y la prensa comenzó a publicar la relación con los nombres de los cartageneros dispuestos a ofrecer sus hogares. La gran mayoría optó por un niño pero hubo casos como el del arquitecto municipal Lorenzo Ros o el famoso maestro Feliciano Sánchez que acogieron dos. 


                                


Finalmente el 30 de Abril a las once y media de la mañana llegaban a la estación de trenes los excursionistas siendo recibidos por la primera autoridad municipal y niños de la Casa de Misericordia, Casa del Niño y el Patronato. Desde allí se dirigieron a la Iglesia de la Caridad donde además de recordar la figura del fundador de los Salesianos, San Juan Bosco, se entonó una Salve y se ofreció un precioso ramo de flores a nuestra Patrona. A continuación marcharon hacia la plaza del Ayuntamiento donde se hizo el reparto de los visitantes escolares entre las familias cartageneras. De los actos llevados a cabo destacó un recital musical celebrado en el Teatro Circo,  un festival gimnástico en el estadio del Almarjal y una misa de campaña en el Castillo de la Concepción oficiada por el Obispo de Cartagena. La nota dulce la puso José Bonmatí, dueño de la confitería “La Royal”, quien obsequió a los niños alicantinos con pasteles elaborados en su establecimiento.  Fue una estancia corta, apenas dos días, los necesarios para que nuestra ciudad y de forma especial un grupo de familias cartageneras justificaran con sus actos un eslogan más que merecido. 






2 comentarios:

  1. Precisamente aquellas Escuelas Salesianas de San José -hoy ubicadas en otro lugar de la ciudad de Alicante, con el nombre de Colegio Don Bosco- celebra su centenario (1914-2014). Entre los actos organizados, se inauguró una exposición fotográfica, que sigue expuesta, donde aparecen fotos del evento de la visita de aquellos alumnos, constituidos como "batallón infantil" a la ciudad de Cartagena, que comenta en su blog.

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  2. Muchas gracias Jose A. por su comentario, las fotografías deben ser muy curiosas, a modo de anécdota le puedo decir que mi bisabuelo acogió en casa a uno de esos niños, un saludo cordial.

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